En la era digital, el Servicio de Administración Tributaria (SAT) ya no espera declaraciones anuales para revisar a las empresas. Utiliza herramientas de análisis de datos y algoritmos que cruzan toda esta información automáticamente. Cuando detectan anomalías, generan alertas, y en algunos casos, abren auditorías o solicitudes específicas.
Hoy, la autoridad fiscal tiene la capacidad de cruzar información en tiempo real gracias a tres pilares fundamentales:
- Facturación electrónica
 
Cada factura que emites o recibes es registrada en los servidores del SAT. Esto le permite conocer tus ingresos, tus proveedores, tus clientes y tus patrones de consumo.
- Depósitos bancarios
 
La autoridad puede solicitar informes periódicos a las instituciones financieras sobre los depósitos en cuentas empresariales o personales vinculadas. Si existen ingresos no facturados, esto podría desencadenar una auditoría o una presunción de ingresos omitidos.
Por otra parte, el SAT puede identificar depósitos en cuentas bancarias extranjeras mediante acuerdos internacionales de intercambio de información financiera. Estas regulaciones obligan a instituciones financieras extranjeras a reportar cuentas pertenecientes a residentes fiscales mexicanos.
- Avisos automáticos y cruces inteligentes
 
Gracias a la tecnología, el SAT puede detectar:
- Facturas emitidas sin relación con movimientos bancarios.
 - Conceptos facturados.
 - Diferencias entre tus declaraciones mensuales y los CFDI emitidos.
 - Entero de impuestos y retenciones.
 - Uso de proveedores con operaciones inexistentes (EFOS).
 
Además, el SAT puede generar «avisos automáticos» cuando detecta inconsistencias, como discrepancias entre ingresos reportados y depósitos en cuentas bancarias.
Recomendaciones clave para tu negocio:
- Factura y declara todos tus ingresos reales, incluso si los recibes en efectivo.
 - Verifica que tus proveedores estén al día en su RFC y que sus registros en los padrones estén vigentes y actualizados.
 - Evita realizar depósitos sin respaldo documental adecuado.
 - Conserva toda la documentación que justifique tus movimientos financieros.
 - Revisa periódicamente el buzón tributario de tu empresa para estar informado y atender en tiempo los mensajes y requerimientos de la Autoridad Fiscal.
 
El SAT ya no «espera» encontrar errores; hoy, los detecta de forma inmediata a través de sus sistemas. La mejor defensa es mantener una contabilidad clara, oportuna y alineada con tus movimientos financieros reales. Además, conservar transparencia y orden en tus registros te ayudará a cumplir con tus obligaciones fiscales sin inconvenientes.
Yazmín García Cano
Socia Quintana Roo